Tardé mucho en ir, por primera vez al teatro. Recuerdo que ya era un joven adulto cuando, por primera vez, escuché el primer cuarteto de Don Juan Tenorio: “¡Cuál gritan esos malditos! / ¡Pero mal rayo me parta / si en concluyendo esta carta / no pagan caros sus gritos!”.
Desde entonces, el amor por este arte no ha hecho más que crecer: Festivales clásicos, propuestas contemporáneas, danza, monólogos, adaptaciones literarias, comedias de unas y otras épocas… Sin duda, el teatro es una de las riquezas artísticas que tenemos cerca.
Por eso, disfruto cuando descubro anunciados en madridesteatro.com festivales como el IV Vividero de las Naves del Español: una propuesta de cuatro espectáculos para todas las edades que permiten que los más pequeños se acerquen a las tablas del teatro, lo ‘desacralicen’ y lo conviertan en parte de su vida.
Esa posibilidad, que por un motivo u otro yo no tuve, es un verdadero regalo para quienes quieren introducir a los pequeños en el apasionante arte y magia del teatro y abrirles la puerta a decenas de mundos imaginarios con los que podrán ir creciendo y disfrutando a lo largo de toda su vida.
Estimular la creatividad y la sensibilidad
Los cuatro espectáculos de Vividero están pensados para público familiar, desde parejas con bebés hasta quienes tienen niños de más de seis años.
A través del trabajo de los actores, la interacción con títeres, de la danza y de la música, los pequeños conocen formas de expresión, comunicación y desarrollo emocional que tienen una aplicación directa y automática en su vida.
Por supuesto, tanto en esta IV edición de Vividero como en la mayor parte de las programaciones teatrales infantiles de Madrid, las historias presentan un equilibrio entre entretenimiento y aprendizaje: los niños crecen en valores como el respeto a la naturaleza y a los otros, la solidaridad, la generosidad, etc…
En definitiva, se educan a la vez que salen del teatro con una sonrisa de oreja a oreja y tras habérselo pasado en grande con otros niños y sus familias.
Madrid: la cartelera de España
Aunque en los últimos años se ha hecho mucho porque incluso las grandes producciones lleguen a provincias, sin duda Madrid es la capital española del teatro.
Desde grandes casas como el Teatro Real, el Teatro Circo Price o el Teatro Español hasta pequeñas salas en las que ver monólogos de compañías de aficionados… Cada tarde de la semana se pueden encontrar decenas de propuestas para olvidar el reloj y disfrutar de excelentes interpretaciones durante un par de horas.
Afortunadamente, webs como Madrid es Teatro hacen un esfuerzo absoluto por aunar toda la propuesta dramatúrgica de la capital en un único portal, desde el que es posible no solo conocer la programación, sino además adquirir las entradas.
Estas herramientas eliminan todas las excusas: ir a Madrid y no acercarse a un teatro –los hay cuyas entradas no superan los diez euros– es un absoluto error.
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